Durante una largo alocución, el dictador Nicolás Maduro insistió en la narrativa de que ganó las elecciones presidenciales del 28 de julio, pese a las pruebas de fraude que ha señalado la oposición democrática.
La tarde del miércoles 31 de julio responsabilizó a los «comanditos» opositores que defendieron los votos de Edmundo González Urrutia, presidente electo de Venezuela según datos ofrecidos por la oposición, de las protestas que hay en todo el país desde el lunes 29.
“Como ciudadano, para mí, esa gente tiene que estar tras las rejas. Ahora si me preguntan cómo jefe de Estado qué debe pasar con Edmundo González Urrutia y María Corina Machado yo diría que debería haber justicia justa y presentarse frente a la Fiscalía y dar la cara. Y no seguir escondiéndose”, dijo Maduro.
De acuerdo con el jefe del régimen, sus adversarios fabricaron actas para desestabilizar. “Espero que todos los candidatos y partidos respondan los requerimientos y la investigación que pueda adelantar la Sala Electoral del Tribunal Supremo de Justicia. En Venezuela va a haber paz y justicia, y las instituciones volverán a funcionar”, señaló.
“Jamás, jamás alcanzarán el poder político. Se los aseguro y sé lo que digo, estos criminales jamás lo alcanzarán”, agregó.
Con información de DLA