El republicano Mike Johnson, reelegido presidente de la Cámara de Representantes, prometió aplicar las políticas del presidente electo Donald Trump, que asumirá el próximo 20 de enero, empezando por «defender las fronteras» de Estados Unidos.
«Deportaremos a extranjeros ilegales peligrosos y criminales, y finalmente terminaremos de construir el muro fronterizo» con México, añadió en un discurso, en el que aseguró que los republicanos «devolverán el poder al pueblo».
«Actuaremos con rapidez, y empezaremos por defender las fronteras de nuestra nación», afirmó Johnson en su discurso tras la elección.
«En coordinación con el presidente Trump, este Congreso dará a nuestros agentes de fronteras e inmigración los recursos que necesitan para hacer su trabajo», dijo.
Añadió y también prometió trabajar para combatir la inflación y ampliar «los recortes fiscales».
«Tenemos mucho que hacer y podemos hacerlo de manera bipartidista», dijo Johnson mientras se comprometía a ayudar a Trump a transformar la economía.
Poder para el «pueblo»
«Podemos luchar contra la alta inflación, y debemos hacerlo. Daremos alivio a los estadounidenses y extenderemos los recortes de impuestos de Trump (…) Vamos a recortar drásticamente el tamaño y el alcance del gobierno, vamos a «devolver el poder al pueblo», declaró.
Donald Trump consiguó mantener unido al bloque republicano días antes de volver a la Casa Blanca pero la votación ilustra las dificultades que supone tener una estrecha mayoría de solo cinco votos en la Cámara Baja del Congreso.
Le había deseado «buena suerte» en un mensaje en su red Truth Social, donde le felicitó tras la votación. «Nuestro país será el beneficiado», afirmó.
Los estadounidenses han «esperado cuatro años por Sentido Común, Fuerza y Liderazgo. Ahora lo tendrán, ¡y Estados Unidos será más grande que nunca!», añadió.
También contaba con el respaldo de Elon Musk, muy influyente desde que se ha convertido en un hombre de confianza de Trump.
Esta votación era esencial porque la Cámara de Representantes necesitaba a un presidente para poder certificar la victoria electoral de Trump, que volverá a la Casa Blanca el 20 de enero, tras un primer mandato de 2017 a 2021.
Los republicanos tienen una mayoría estrecha de 219 escaños contra los 215 de los demócratas y Johnson necesitaba que todos menos uno votaran por él.
Johnson, un abogado de 52 años, consiguió el puesto en 2023 después de un golpe de palacio que paralizó la Cámara de Representantes durante semanas.
Pero algunos miembros de su partido lo consideran excesivamente consensual y blando en materia de recortes de gastos.
«Arrancarme todas las uñas»
«Pueden arrancarme todas las uñas, pueden clavarme bambú, pueden empezar a cortarme los dedos: no votaré por Mike Johnson», había declarado el más indignado de todos ellos, el republicano Thomas Massie, al canal conservador OAN. Al final, fue el único que se opuso.
En mayo pasado 11 republicanos votaron a favor de destituir a Johnson después de que enfureciera al ala trumpista llevando a la Cámara un enorme paquete de ayuda a Ucrania. De aquella los demócratas lo salvaron.
Como se esperaba los demócratas votaron por su líder Hakeem Jeffries, quien se comprometió a cooperar con los republicanos pero advirtió que recortes en programas de ayuda como la seguridad social serían «inaceptables».
FUENTE: Con informaciòn de AFP