En la lista de mujeres en la sombra de la Edad de Plata de las letras españolas está María Lejárraga. Nacida en San Millán de la Cogolla (La Rioja) en 1874, destacó en muchos ámbitos fuera de la literatura: estudió Comercio, fue profesora de inglés y viajó a Bélgica gracias a una beca.
Adelantada a su tiempo, fue novelista, ensayista, dramaturga y traductora. Creaciones suyas como El amor brujo y Canción de cuna, sin embargo, se publicaron con el nombre de su marido Gregorio Martínez Sierra, quien también llegó a pronunciar discursos feministas escritos por ella. Su obra llegó hasta manos de Walt Disney, pero la experiencia con el empresario y animador fue una decepción.
En 1951, Lejárraga envió un manuscrito de su cuento Merlín y Viviana a Disney. La historia sigue a un perro que se enamora de una gata coqueta. La autora compartió este relato con el animador por si estaba interesado en hacer una película, pero Disney se lo devolvió meses después. Pasaron cuatro años y en 1955 se estrenó La dama y el vagabundo. Lejárraga vio en el filme una historia idéntica a la suya.
La escritora envió una carta a su traductora Collice Portnoff en la que le habló de lo que había pasado. «La enviamos a Walt Disney, la tuvo un par de meses y la devolvió diciendo que no admitían más que las obras que habían encargado», afirmó.
Como añadió:
Juan Aguilera e Isabel Lizarraga, expertos de la Edad de Plata que participaron en el libro que recopila los cuentos de Lejárraga Viajes de una gota de agua, no encontraron tantas similitudes como la autora. Como ambos contaron a El País en 2018, «los parecidos son escasos» y, además, el proyecto de Disney empezó a gestarse antes de que la escritora compartiera con ellos su cuento.
Un clásico de Disney
La dama y el vagabundo es, a día de hoy, uno de los grandes clásicos de Disney. El filme sigue la historia de amor de una cocker spaniel que es mascota de una familia humana y un perro callejero. La película ha tenido el mismo tratamiento que el resto de clásicos de animación del estudio: en 2020 se estrenó su versión de acción real en Disney+.
Lejárraga murió en el exilio en Buenos Aires (Argentina) en 1974. Antes publicó el libro de memorias Gregorio y yo, medio siglo de colaboración en el que desveló la verdad sobre sus obras y su marido.
SENSACINE