“Me siento honrado de recibir la nominación del presidente Trump para servir como el próximo administrador de la NASA”, fueron las primeras palabras del empresario y astronauta Jared Isaacman, luego de que el presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump, lo apuntara como el próximo administrador de la Agencia Espacial de EEUU, previa aprobación del Congreso de ese país.
Isaacman, el empresario multimillonario que dirigió el primer vuelo de una tripulación totalmente privada de astronautas y se convirtió en el primer civil en caminar en el espacio este año, agradeció a través de una carta publicada en la red social X, propiedad de Elon Musk y próximo funcionario de Trump.
Con la mente puesta en el sueño que persigue, que es que el ser humano viva y trabaje en el espacio, Isaacman buscará en su nuevo cargo al frente de la NASA, marcar el comienzo de una era en la que la humanidad se convierta en una verdadera civilización espacial.
Si el Senado lo confirma, Isaacman de 41 años, también un experimentado piloto de aviones con su propio equipo de exhibición, guiará a la agencia espacial en un momento crucial en sus 76 años de historia, mientras la NASA está embarcada en la misión Artemis para que el ser humano pueda volver a la Luna desde que la visitó por última vez en 1972.
El astronauta, que también cofundó Draken International, la mayor fuerza aérea privada del mundo, dijo en un tuit que se sentía “honrado” de recibir la nominación de Trump y que estaría “agradecido” de servir.
“Habiendo tenido la suerte de ver nuestro asombroso planeta desde el espacio, me apasiona pensar que Estados Unidos liderará la aventura más increíble en la historia de la humanidad”, escribió el astronauta que voló al espacio en 2021 y 2024 a bordo de los cohetes Falcon 9 de SpaceX, también propiedad de Musk.
“En mi última misión al espacio, mi tripulación y yo viajamos más lejos de la Tierra que nadie en más de medio siglo. Puedo decir con confianza que esta segunda era espacial recién comienza. El espacio tiene un potencial incomparable para avances en manufactura, biotecnología, minería y tal vez incluso caminos hacia nuevas fuentes de energía. Inevitablemente habrá una economía espacial próspera, una que creará oportunidades para que innumerables personas vivan y trabajen en el espacio”, aseguró el candidato a dirigir la NASA.
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