El gobernador Ron DeSantis ha anunciado un significativo incremento de 1.25 mil millones de dólares en el presupuesto anual destinado exclusivamente a los salarios de los maestros en Florida, enviando un mensaje claro y directo al Sindicato de Maestros del estado. «Yo no quiero que este dinero deje de ir a los maestros, no quiero que vaya al Sindicato de Maestros, quiero que vaya a los maestros», declaró enfáticamente DeSantis.
El incremento presupuestario representa una de las mayores inversiones en la historia de Florida en relación con la remuneración de los educadores.
Según datos proporcionados por la oficina del Gobernador, el salario promedio de un maestro en el estado alcanzará los $48,286, un aumento significativo en comparación con los poco más de $37,000 que se pagaban hace ocho años. DeSantis no dudó en calificar este movimiento como «lo mejor que hemos hecho en la historia de Florida en relación a los maestros».
Manny Díaz, Comisionado del Departamento de Educación de Florida, respaldó el anuncio del gobernador durante una conferencia de prensa realizada en la escuela COHEA de Hialeah. Díaz subrayó que desde que DeSantis asumió el cargo, se han destinado más de 4 mil millones de dólares a los salarios de los maestros.
«Es importante que esos 4 mil millones de dólares entren en los bolsillos de los maestros y que no lo usen como un arma durante negociaciones para otras cosas y temas como identidad de género», afirmó Díaz, criticando al Sindicato de Maestros por supuestamente desviar fondos hacia agendas sociales en lugar de centrarse en los intereses del gremio.
El Sindicato de Maestros de Miami-Dade no tardó en responder a las declaraciones de Díaz y DeSantis. En un comunicado, expresaron su descontento con el estado actual de la remuneración de los educadores en Florida. «Desafortunadamente, Florida ocupa el puesto 50 a nivel nacional en remuneración de maestros, una clasificación que continúa bajando año tras año. Si bien damos la bienvenida a todas las inversiones futuras en salarios a los docentes, lo que el gobernador ha asignado hasta ahora ha resultado en un aumento del 2% para los educadores de Miami-Dade, muy por debajo incluso de la inflación», señalaron.
El anuncio de DeSantis ha reavivado el debate sobre la administración y el destino de los fondos destinados a la educación en Florida. Mientras el gobernador y sus aliados argumentan que los recursos deben ir directamente a los maestros, evitando intermediarios como los sindicatos, estos últimos sostienen que las inversiones han sido insuficientes para abordar la creciente inflación y el costo de vida en el estado.